El primer Shikinen Sengu se realizó en el año 690, en la ciudad de Ise, Provincia de Mie, Japón. Consiste en un conjunto de ceremonias que duran hasta 8 años, comenzando con el ritual de la tala de árboles para la construcción del nuevo Santuario de Ise y concluyendo con el traslado del espejo sagrado –símbolo de Amaterasu-Omikami– al nuevo santuario por sacerdotes Jingu. Cada 20 años, se construye un nuevo palacio con exactamente las mismas dimensiones que el original, en un terreno adyacente al santuario principal. Shikinen Sengu está vinculado a la creencia sintoísta de la muerte periódica y la renovación del universo, transmitiendo además las antiguas técnicas constructivas en madera de generación en generación.
La idea de levantar un edificio con fecha de caducidad no es tan común. De hecho, se aborda muy poco el tema de la vida útil de los edificios. Una vez demolido, ¿a dónde van los materiales? ¿se eliminarán en vertederos o se podrán reutilizar en nuevos proyectos? Existen construcciones, métodos de construcción y materiales que facilitan este proceso. Otros hacen inviable la reutilización, debido a una serie de factores.